El hombre es el giro del aire entre lo que se dice del hombre.
El hombre es algo que se palpa. De su brazo lo tomas, entre sus manos te carga. Sus manos son tibias y frías, sus pies dóciles, tensos y crudos.
Su aliento es agrio, es el hedor de carne y flores muertas.
El hombre es un momento del campo o la ciudad.
El hombre se dobla, se perfora, gime.
El hombre es un niño que corre asustado.
mas potente que el hambre, su rostro es hambre, fiebre, anhelo por la inyección que lance dagas de luz por sus venas... se enciende su rostro rojo bañado por el reflejo y escalofrío de su propia muerte...
El hombre es algo que se adivina
es huella, es sombra que se diluye en la mirada
El hombre es algo que se respira, que se construye con ramas y tristezas
El hombre es algo que se respira, poros abiertos, boca abierta, con raíces de sangre sobre el pulmón.
El hombre se escribe con la saliva
El hombre es algo que se bebe
que se vende y olvida.
Hola, Andrés; buenos días desde Orizaba...
ResponderEliminarHace algún tiempo ya, había visto algo de lo que escribías, sin embargo, es hasta ahora -a instancias de un muy querido amigo mutuo- que tranquilamente dispuse un espacio para leerte al través de tus líneas y conocerte por medio de tus imágenes en flickr.
Me gustó este poema y la frase recurrente como esencia vibrante lo dice todo: EL HOMBRE ES ALGO QUE SE PALPA, porque ¿palpar algo intangible sería válido decir?... Y ¿qué puede ser más palpable que la mórbida presencia de un defectible y maravilloso ser humano?...
Vida, muerte; simbiosis perfecta y fusión eterna entre lo simbólico de la vida misma y los más arraigados y pasionales anhelos del interior: eso es el hombre, tan lleno de falencias como de hermosas connotaciones de existencia.
Me gustó mucho este escrito y sinceramente, me agrada tu forma de percibir los contrastantes signficados y significantes de lo que es el pervivir. Te felicito en verdad.
Saludos cordiales para tí.
gracias Delia por tus comentarios y el giro que le das a palpar lo impalpable. Saul me dijo que me visitarías y espero que nuestra comunicación progrese. También me dijo que escribes y me interesa conocer tu trabajo. Te mando un cálido abrazo desde Albuquerque hasta ese México que extraño tanto.
EliminarGracias a tí, Andrés; realmente es un gusto estar en contacto contigo y que me permitas continuar en constante comunicación al través de tus imágenes, de tu obra pictórica y de tus poemas.
ResponderEliminarYo simplemente externo mis pensamientos... mis introspecciones -como lo menciono en el título de mi blog-, así que, cuando gustes o tengas un pequeño espacio, con todo gusto comparto también contigo mis breves letras. Saúl es un gran amigo... realmente para mí lo es de mucho tiempo atrás, independientemente de su irrefutable calidad como artesano de lo visual (tal y como a él le gusta hacerse visualizar). Gracias por todo, Andrés. Saludos con todo afecto desde Orizaba en Veracruz, hasta Albuquerque.